Al momento de estrenarlas tienen un sonido muy brillante, agudo, con muchos armónicos en frecuencias altas. Las distorsiones suenan ricas y complejas, las primeras horas es un sonido algo abrumador que exige control del tono. Sin embargo en limpio proporcionan un sonido bonito y cautivador desde el primer momento, lleno de armónicos.
Después de unas semanas, como es lógico su sonido se va amansando, pero llegan a aguantar varios meses sin roturas, aunque el brillo ya se haya apagado.
Son unas cuerdas bastante delgadas, se aprecia a simple vista, quizás por el tipo de esmalte y el entorchado.