La calidad de los materiales y de fabricación parece buena. La base es suficientemente pesada y ancha como para dar estabilidad a uno o dos micrófonos de cualquier tipo (sin jirafa, por supuesto). El mecanismo de ajuste de rosca funciona como debe. Lo mejor, sin embargo es el diseño de la base, que permite apilar hasta cinco soportes para guardarlos, de manera que, entre todos, ocupan el espacio de uno sólo.